La gran protagonista de la visita es la cripta de la Catedral. Pensada como última morada de los prelados gasteiztarras, fue diseñada con todo lujo de detalles. Es un canto a la naturaleza humana y a la misericordia divina. Por ello encontramos miles de símbolos y representaciones crípticas y complejas de entender. Ahí está el reto, descúbrelo.

Los siete pecados capitales aparecen representados con imágenes inspiradas en la Biblia, pero, también, en los mitos clásicos y en el refranero popular. Escenas perturbadoras y a la vez tan atractivas que es imposible dejar de mirarlas, llenan los pilares de la cripta. 

En un templo tan magnífico no puede vencer el pesimismo, por ello, preferentemente en sus vidrieras, se plasmó una vívida y colorida representación celestial, firmada por el taller artesano más prestigioso de Europa, la casa Maumejean. La vidriería vivió uno de sus momentos artísticos más pujantes tanto por las técnicas empleadas como por sus atrevidos y ambiciosos programas iconográficos. Gracias a varios materiales podremos conocer, desde un punto de vista técnico, cómo se hicieron. 

 Punto de encuentro: Portal SUR (Calle Cadena y Eleta, s/n). en el interior, en el mostrador de visitas guiadas.

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